LA PUERTA A CERO

Dicen que el vaso se puede ver medio lleno o medio vacío. El otro día leí que el Betis llevaba dos partidos sin encajar gol; visto así, en frío, llegando de viaje desde Canadá o cualquier otro lugar allende los mares, parece buena noticia, pero la realidad completa nos dice que el Betis lleva, además, dos partidos sin marcar y un encuentro completo sin tirar a puerta.

Ya no es que Rubén se resfríe o se tuerza un pie, es que si no tira Rubén, no tira nadie del equipo. ¿Culpable? Para mí está claro, Velázquez. Sea mejor o peor el plantel, cualquier equipo tira a puerta, llega al área rival y crea ocasiones, hasta la Ponferradina nos metió cuatro. Pero claro, el equipo es de lo peor que he visto nunca; los laterales, al voleón; los centrales, con el tembleque; Matilla, no está; Lolo Reyes, no puede solo; las bandas no existen y Renella se cree que es Ibrahimovic. Y el entrenador no es capaz de voltear esto, no modifica nada y cuando habla sube el pan.

El domingo no lo vi. Casi que mejor.

Esta noche, el Lugo, como alguno juegue la mitad de lo que lo hacía su entrenador, nos caen tres. Que Dios nos coja confesados.